MÉTODOLOGÍAS
MÉTODOLOGÍA INFANTIL 3-7AÑOS

Clases de piano a niños: ¿cómo enseñarles?
Para que podamos enseñar a un niño a tocar el piano pon atención a esta serie de pasos que te explicamos.
Evaluamos el interés, las ganas y el deseo del niño de aprender a tocar el piano. Asimismo, el niño debe poder seguir instrucciones y prestar la suficiente atención durante un primer período de 15-20 minutos. Es importante mencionar que se recomienda la enseñanza del piano antes de los 5 años de edad, para facilitar el proceso pedagógico.
Elegimos el método que consideramos más adecuado para su aprendizaje.
Asignamos un conjunto de ejercicios técnicos, con el empleo de escalas y de acordes, en el caso de que se opte por la técnica tradicional de estudio.
Focalizamos la enseñanza en la importancia de la práctica y de la constancia. En efecto, un niño que tenga menos de 7 años de edad debe poder practicar aproximadamente unos 15-20 minutos diarios.
Estamos siempre atento a las señales positivas y/o negativas del niño. En el caso de notarlo cansado, es mejor dejar la clase y seguir otro día. Es esencial el aprendizaje absoluto de los principios básicos, sin los cuales no se puede continuar con los conocimientos teóricos y prácticos subsiguientes.
Intentamos unir la educación musical con el juego. El niño debe sentir que la clase de piano es un momento que espera con ilusión.

No sirve de nada saber que tal nota se encuentra en tal interlínea de la clave de sol si no se sabe al mismo tiempo cuál es el sonido producido por esa nota, o incluso a qué nota corresponde. Aunque el aprendizaje del solfeo es bastante teórico, no debemos olvidar que la música es una cuestión de sonido, de oído, de escuchar.
Aprender el ritmo para tocar el piano
Tendrás que estudiar el ritmo al mismo tiempo que estudias solfeo.
Es preferible empezar a estudiar el ritmo fuera de todo contexto musical, simplemente utilizando tu cuerpo (golpeando las manos para producir el ritmo).
Después, podrás aprender la manera en la que el ritmo se transcribe por escrito, en una partitura, la manera en la que «cobra vida» en las notas.
Aprenderás los diferentes tiempos: la redonda, la blanca, la negra, la corchea, la semicorchea, el tresillo, etc.
Lo importante es saber las relaciones que existen entre los diferentes tiempos: por ejemplo, una negra se corresponde con dos corcheas. Una vez que estos elementos se hayan asimilado, puedes realizar un buen ejercicio que consiste en encadenar diferentes ritmos, en el mismo tempo, y después trabajar el ritmo al mismo tiempo que el solfeo.
La práctica musical del piano
Evidentemente, la finalidad de estos ejercicios preliminares es aprender a tocar el piano.
La tercera parte del método tradicional abarca la práctica musical, el aprendizaje de piezas musicales y también la práctica de ejercicios técnicos.
Aunque hoy en día las escalas no son una parte central en la enseñanza de la música, son un buen ejercicio para mejorar la práctica del piano. Todos los métodos de piano para principiantes incluyen ejercicios técnicos y partituras muy fáciles de tocar y después la dificultad de las partituras aumenta de manera progresiva.
Ten en cuenta que estas tres partes no son tres etapas sucesivas. En la práctica, aunque algunos aconsejan aprender solfeo previamente sin ninguna práctica musical, se recomienda trabajar al mismo tiempo el solfeo, el ritmo y la práctica del piano propiamente dicha.
Además, al tocar a la primera las partituras de piano, harás grandes progresos en solfeo y en ritmo. De manera inversa, al trabajar el solfeo de manera continuada, cada vez te será más fácil tocar a la primera las partituras.
J.M Otero